Título: Merlí
Temporadas: Tres
Creador: Héctor Lozano
Reparto principal: Francecs Orella, David Solans, Carlos Cuevas, Candela Antón de Vez, Albert Baró, Pau Poch, Elisabet Casanovas, Ana María Barbany, Marcos Franz, Adrian Grösser, Pere Ponce, Pau Durà, Marta Marco, Asunción Balaguer.
Género: Comedia Dramática
Primera emisión: 2015
Plataforma: Netflix
¡Jello!
Hacía tiempo que no os traía alguna serie pare ver de las que yo haya visto y como estamos en los tiempos que estamos, aquí vengo con una que tengo que decir que está entre mis series favoritas sin ninguna duda. Ya no solo por los personajes tan entrañables que tiene, sino también por todo el mensaje que hay detrás, toda la esencia y la reivindicación contra el sistema educativo que predomina en nuestra sociedad y también los problemas de adolescentes que están ahí presentes pero que pocas personas tienen en cuenta por pensar que son solo cosa de niños.
Me ha parecido una serie muy buena y, aunque pueda parecer que es para adolescentes, no lo es para nada. Hay escenas duras donde se muestra la vida de muchos de los protagonistas nada felices, también hay un lenguaje explícito y claro, sobre todo con el protagonista, Merlí que no se corta ni un pelo a la hora de decir las cosas, algo que me encanta de él y que es su característica más fuerte. Creo que es una serie muy necesaria tanto en institutos, sobre todo alumnos de bachillerato por lo que he dicho anteriormente sobre su contenido adulto, y también por todas aquellas personas que necesiten una dosis de realidad con toques de humor y un poco de utopía porque, ¿quién no hubiera querido un profesor como Merlí? A mí, sin duda, me hubiera encantado tenerlo. Y tranquilos, esta reseña está libre de spoilers.
SINOPSIS
Los métodos de Merlí no son como los del resto de profesores. Su misión es impartir conocimientos y que sus alumnos entiendan las principales líneas de pensamiento de la filosofía, aunque haya que romper con lo establecido y tener un trato con los alumnos más cercano. Merlí siente los principios de las clases que imparte pero no los lleva a su vida privada: es un referente para sus discípulos, a los que llama peripatéticos, pero es incapaz de genera ningún vínculo afectivo con su hijo Bruno que ahora también es su alumno y predica respeto que brilla por su ausencia en su relación con las mujeres con las que flirtea.
RESEÑA
No esperéis un personaje protagonista carismático, con sentido de la justicia, bueno y una especie de superhéroe. Es un héroe pero a su manera. Merlí es un profesor irreverente, con una lengua un tanto larga y afilada y que no se corta en decir lo que piensa hiera a quien hiera, ya sea su hijo, su madre o el director del instituto. Pero me encanta lo que transmite la serie relacionado con el amor al arte, con el amor de ser profesor y hacer entender y estudiar a alumnos que tienen sus propios problemas. Que no son simples máquinas de memorizar temarios para después hacer exámenes que no les aporta nada.
Me encanta que Merlí sea profesor de filosofía y lleve esta materia un paso más allá, como hacían los griegos, sacar a sus alumnos de clase, hacer ver que la filosofía no es solo una materia, sino que es algo que se puede llevar a cabo en la vida misma de uno. Cada capítulo es una lección de filosofía, es un temario de un filósofo que se estudia en bachillerato y habla sobre ese filósofo durante una semana, que es lo que se supone que dura un capítulo. Cada semana es un filósofo diferente y tengo que admitir que sentía como si yo estuviera allí con ellos escuchando la clase, aprendiendo de lo que contaba Merlí y cómo esas cosas se adaptan a la vida de los alumnos de su clase. Esto es lo que más me ha gustado, he visto la filosofía desde otro punto de vista que no me habían enseñado cuando la estudié. Puedo decir que por primera vez he entendido a cada filósofo de verdad, sin tener que aprender nada de memoria para solo soltarlo, sin saber realmente qué estaba leyendo.
Otro de los puntos fuertes de la serie, a mi parecer, es esa utopía de profesor y de instituto que se crea alrededor de Merlí. Como he dicho al principio, este profesor es irreverente y está totalmente en contra de las medidas educativas que hay hoy día para los alumnos, por eso sus clases son diferentes y muy criticadas por el claustro de profesores que ven como un loco al nuevo profesor. Y digo que es una utopía porque las contestaciones que tiene Merlí hacia el director del instituto y hacia otros profesores, incluso a algunos alumnos o padres. Seguramente si en la realidad pasara eso, se le abriría un expediente a ese profesor y, probablemente, no volvería a ejercer nunca. Pero creo que eso es lo bonito de la serie, ver cómo un profesor se enfrenta a padres que creen que son los dueños del instituto, ver cómo se implica con cada alumno ayudándolos en sus vidas sin verlos como simples cajas vacías que hay que llenar. Cómo lucha por cambiar las cosas desde dentro sin importarle nada. También es cierto que esto no cae en saco roto, habrá momentos buenos y malos debido a ese carácter suyo.
Y el punto que creo que más me ha gustado es la cercanía del profesor con sus alumnos, como ya he dicho. Hay alumnos que sufren bullying, otros que tienen problemas con sus padres o con drogas o con su identidad sexual, cosas normales que ocurren en todos los institutos y a cada persona le afecta diferente. Eso lo muestra muy bien durante toda la serie y, a lo largo de ella, vemos cómo van evolucionando los personajes, cómo pasan de ser niños a jóvenes adultos y van lidiando con su vida poco a poco, fallando, cambiando pero, sobre todo, aprendiendo.
Cada personaje es único, creo yo, y todos tienen su importancia y a lo largo de cada temporada se van sumando nuevos personajes y van diluyéndose otros. A continuación voy a dejar una lista hablando un poco de ellos de los que considero más importantes. Sé que hay muchos más con mucha relevancia y muy importantes, pero pienso que si hablo de ellos destripo ciertos aspectos de la trama.
Es el protagonista, como he dicho un poco más arriba. Creo que ya he dicho todo de él: un poco mujeriego, irreverente, apasionado de la filosofía y de la enseñanza y reivindicativo. Todos estos aspectos lo van a acompañar a lo largo de cada capítulo y a veces le darán alegrías y otras veces lo meterá en muchos problemas. Pero me encanta que sea un personaje con las cosas claras, aunque va cambiado con el tiempo al ver que no todo se soluciona con lucha, también el diálogo o, a veces, hay que conformarse con lo que se tiene. Uno de mis personajes favoritos sin duda, aunque a veces me hay sacado de quicio.
Es la madre de Merlí y la abuela de Bruno. Es un personaje muy secundario que aparece en momentos puntuales, aunque a medida que va avanzando la serie va teniendo más protagonismo. Me ha encantado. Se nota que su hijo ha salido a ella, pero ella, al ser más mayor, se nota que con los años ha aprendido y ha cambiado poco a poco sin perder la chispa que tiene. Me ha parecido un personaje entrañable, con buenas dosis de humor y con un carácter tan apaciguador que me ha encandilado. Además es la única capaz de hacer centrarse a su hijo con buenas frases que hacen pensar a cualquiera.
El hijo de Merlí. Es un personaje que he tenido que ir queriendo muy poco a poco porque en los primeros capítulos me sacaba muchísimo de mis casillas. Entiendo su carácter y por qué hace lo que hace en ciertas ocasiones, pero me resulta al principio demasiado desquiciado. Como ya digo, entiendo el por qué de sus acciones por el secreto que guarda dentro y que no es capaz de sacar y también influye que su padre, tal y como es, sea su profesor y encima de en su clase puede provocar cierto rechazo. Pero sí es cierto que es uno de los personajes más evolutivos de la serie y eso ha sido lo que más me ha gustado de él.
Un personaje que me ha encantado de principio a fin. Es el típico malote de la clase con una vida un tanto oscura que va de chulo metiéndose con todo el mundo, fumando y tomando drogas, pero que, gracias a Merlí, empieza a encauzar su vida poco a poco hasta convertirse en una persona completamente diferente a la que era en el primer capítulo. No desvelaré mucho, pero esos cambios me han impresionado mucho y algunos no me los esperaba para nada. Es sin duda uno de los mayores protagonistas junto con Merlí y en el que más peso recae de la trama y con razón. Sin duda mi personaje favorito después de Merlí y otro más que no diré porque me parece que tiene mucho peso en la historia y no quiero desvelarlo para que lo descubráis con el mismo impacto que me produjo a mí.
Con este personaje me ha pasado todo lo contrario que con Tania. Empezó siendo uno de mis favoritos porque entendía su causa y sus arrebatos, pero pasó a ser un personaje que me sacaba mucho de quicio, tanto, que en algunas ocasiones llegué a odiarlo muchísimo. Es el alumno buenazo, que deja todos los apuntes y deberes, sacando notazas porque sus padres se lo imponen, pero termina revelándose contra todo eso para ser él mismo sin pensar en lo que dirán los demás. Aunque no me haya gustado sí es cierto que representa a un tipo de alumno que se da mucho hoy día, desafortunadamente. Ese alumno cuyos padres están tan encima de él con respecto a que saque buenas notas que terminan asfixiándolo sin darse cuenta. Está muy bien trabajado y es por eso que creo que me ha calado hondo, aunque sea para mal.
Es el típico graciosillo de clase que siempre está dispuesto a hacer cualquier broma sin darse cuenta de que puede ofender a alguien, pero con un corazón muy noble que termina por vencer a esa faceta suya de cuenta chistes. Me ha encantado su historia. Es tierna pero dura a la vez y es de esos personajes que te producen ternura a medida que los vas conociendo. Al principio me produjo cierto rechazo por ser ese típico bromista toca narices que no tienen ninguna gracia, pero pasó a ser un osito de peluche adorable con mucho que ofrecer. También me parece que es uno de los que más evoluciona para bien y con cambios muy drásticos.
Con ella me ha pasado un poco como con Tania, aunque Berta es todo lo contrario. Es esa chica macarra que contradice todo lo que le digan y salta a la más mínima sin importarle las consecuencias. Pero, como es de esperar, todo ese carácter se debe a la vida que lleva con su familia. Y digo que me ha pasado un poco como con Tania porque al principio apenas aparece dos o tres veces en los capítulos y no se sabe nada de ella, de su vida personal, hasta mucho después. Es un personaje que ha ido cogiendo protagonismo a medida que pasan los capítulos hasta convertirse en una protagonista más también con sus partes oscuras y sus partes claras, evolucionando a la par que los demás y una evolución muy grande.
¡Jello!
Hacía tiempo que no os traía alguna serie pare ver de las que yo haya visto y como estamos en los tiempos que estamos, aquí vengo con una que tengo que decir que está entre mis series favoritas sin ninguna duda. Ya no solo por los personajes tan entrañables que tiene, sino también por todo el mensaje que hay detrás, toda la esencia y la reivindicación contra el sistema educativo que predomina en nuestra sociedad y también los problemas de adolescentes que están ahí presentes pero que pocas personas tienen en cuenta por pensar que son solo cosa de niños.
Me ha parecido una serie muy buena y, aunque pueda parecer que es para adolescentes, no lo es para nada. Hay escenas duras donde se muestra la vida de muchos de los protagonistas nada felices, también hay un lenguaje explícito y claro, sobre todo con el protagonista, Merlí que no se corta ni un pelo a la hora de decir las cosas, algo que me encanta de él y que es su característica más fuerte. Creo que es una serie muy necesaria tanto en institutos, sobre todo alumnos de bachillerato por lo que he dicho anteriormente sobre su contenido adulto, y también por todas aquellas personas que necesiten una dosis de realidad con toques de humor y un poco de utopía porque, ¿quién no hubiera querido un profesor como Merlí? A mí, sin duda, me hubiera encantado tenerlo. Y tranquilos, esta reseña está libre de spoilers.
SINOPSIS
Los métodos de Merlí no son como los del resto de profesores. Su misión es impartir conocimientos y que sus alumnos entiendan las principales líneas de pensamiento de la filosofía, aunque haya que romper con lo establecido y tener un trato con los alumnos más cercano. Merlí siente los principios de las clases que imparte pero no los lleva a su vida privada: es un referente para sus discípulos, a los que llama peripatéticos, pero es incapaz de genera ningún vínculo afectivo con su hijo Bruno que ahora también es su alumno y predica respeto que brilla por su ausencia en su relación con las mujeres con las que flirtea.
RESEÑA
No esperéis un personaje protagonista carismático, con sentido de la justicia, bueno y una especie de superhéroe. Es un héroe pero a su manera. Merlí es un profesor irreverente, con una lengua un tanto larga y afilada y que no se corta en decir lo que piensa hiera a quien hiera, ya sea su hijo, su madre o el director del instituto. Pero me encanta lo que transmite la serie relacionado con el amor al arte, con el amor de ser profesor y hacer entender y estudiar a alumnos que tienen sus propios problemas. Que no son simples máquinas de memorizar temarios para después hacer exámenes que no les aporta nada.
Me encanta que Merlí sea profesor de filosofía y lleve esta materia un paso más allá, como hacían los griegos, sacar a sus alumnos de clase, hacer ver que la filosofía no es solo una materia, sino que es algo que se puede llevar a cabo en la vida misma de uno. Cada capítulo es una lección de filosofía, es un temario de un filósofo que se estudia en bachillerato y habla sobre ese filósofo durante una semana, que es lo que se supone que dura un capítulo. Cada semana es un filósofo diferente y tengo que admitir que sentía como si yo estuviera allí con ellos escuchando la clase, aprendiendo de lo que contaba Merlí y cómo esas cosas se adaptan a la vida de los alumnos de su clase. Esto es lo que más me ha gustado, he visto la filosofía desde otro punto de vista que no me habían enseñado cuando la estudié. Puedo decir que por primera vez he entendido a cada filósofo de verdad, sin tener que aprender nada de memoria para solo soltarlo, sin saber realmente qué estaba leyendo.
Otro de los puntos fuertes de la serie, a mi parecer, es esa utopía de profesor y de instituto que se crea alrededor de Merlí. Como he dicho al principio, este profesor es irreverente y está totalmente en contra de las medidas educativas que hay hoy día para los alumnos, por eso sus clases son diferentes y muy criticadas por el claustro de profesores que ven como un loco al nuevo profesor. Y digo que es una utopía porque las contestaciones que tiene Merlí hacia el director del instituto y hacia otros profesores, incluso a algunos alumnos o padres. Seguramente si en la realidad pasara eso, se le abriría un expediente a ese profesor y, probablemente, no volvería a ejercer nunca. Pero creo que eso es lo bonito de la serie, ver cómo un profesor se enfrenta a padres que creen que son los dueños del instituto, ver cómo se implica con cada alumno ayudándolos en sus vidas sin verlos como simples cajas vacías que hay que llenar. Cómo lucha por cambiar las cosas desde dentro sin importarle nada. También es cierto que esto no cae en saco roto, habrá momentos buenos y malos debido a ese carácter suyo.
Y el punto que creo que más me ha gustado es la cercanía del profesor con sus alumnos, como ya he dicho. Hay alumnos que sufren bullying, otros que tienen problemas con sus padres o con drogas o con su identidad sexual, cosas normales que ocurren en todos los institutos y a cada persona le afecta diferente. Eso lo muestra muy bien durante toda la serie y, a lo largo de ella, vemos cómo van evolucionando los personajes, cómo pasan de ser niños a jóvenes adultos y van lidiando con su vida poco a poco, fallando, cambiando pero, sobre todo, aprendiendo.
Cada personaje es único, creo yo, y todos tienen su importancia y a lo largo de cada temporada se van sumando nuevos personajes y van diluyéndose otros. A continuación voy a dejar una lista hablando un poco de ellos de los que considero más importantes. Sé que hay muchos más con mucha relevancia y muy importantes, pero pienso que si hablo de ellos destripo ciertos aspectos de la trama.
- Merlí (Francesc Orella)
Es el protagonista, como he dicho un poco más arriba. Creo que ya he dicho todo de él: un poco mujeriego, irreverente, apasionado de la filosofía y de la enseñanza y reivindicativo. Todos estos aspectos lo van a acompañar a lo largo de cada capítulo y a veces le darán alegrías y otras veces lo meterá en muchos problemas. Pero me encanta que sea un personaje con las cosas claras, aunque va cambiado con el tiempo al ver que no todo se soluciona con lucha, también el diálogo o, a veces, hay que conformarse con lo que se tiene. Uno de mis personajes favoritos sin duda, aunque a veces me hay sacado de quicio.- Carmina (Ana María Barbany)
- Bruno (David Solans)
El hijo de Merlí. Es un personaje que he tenido que ir queriendo muy poco a poco porque en los primeros capítulos me sacaba muchísimo de mis casillas. Entiendo su carácter y por qué hace lo que hace en ciertas ocasiones, pero me resulta al principio demasiado desquiciado. Como ya digo, entiendo el por qué de sus acciones por el secreto que guarda dentro y que no es capaz de sacar y también influye que su padre, tal y como es, sea su profesor y encima de en su clase puede provocar cierto rechazo. Pero sí es cierto que es uno de los personajes más evolutivos de la serie y eso ha sido lo que más me ha gustado de él.- Pol (Carlos Cuevas)
Un personaje que me ha encantado de principio a fin. Es el típico malote de la clase con una vida un tanto oscura que va de chulo metiéndose con todo el mundo, fumando y tomando drogas, pero que, gracias a Merlí, empieza a encauzar su vida poco a poco hasta convertirse en una persona completamente diferente a la que era en el primer capítulo. No desvelaré mucho, pero esos cambios me han impresionado mucho y algunos no me los esperaba para nada. Es sin duda uno de los mayores protagonistas junto con Merlí y en el que más peso recae de la trama y con razón. Sin duda mi personaje favorito después de Merlí y otro más que no diré porque me parece que tiene mucho peso en la historia y no quiero desvelarlo para que lo descubráis con el mismo impacto que me produjo a mí.- Tania (Elisabet Casanovas)
La mejor amiga de Bruno y la típica chica de clase empollona, buena, que nunca a roto un plato y que no quiere meterse en problemas. Me ha pasado con ella como con Bruno. Al principio no me caí ni fu ni fa, para mí era un personaje más. Pero después va cogiendo fuerza y al final de la primera temporada me ha sorprendido muchísimo. No tanto como para convertirse en uno de mis personajes favoritos, pero sí de esos que dejan huella y que no puedes olvidar.
- Joan (Albert Baró)
Con este personaje me ha pasado todo lo contrario que con Tania. Empezó siendo uno de mis favoritos porque entendía su causa y sus arrebatos, pero pasó a ser un personaje que me sacaba mucho de quicio, tanto, que en algunas ocasiones llegué a odiarlo muchísimo. Es el alumno buenazo, que deja todos los apuntes y deberes, sacando notazas porque sus padres se lo imponen, pero termina revelándose contra todo eso para ser él mismo sin pensar en lo que dirán los demás. Aunque no me haya gustado sí es cierto que representa a un tipo de alumno que se da mucho hoy día, desafortunadamente. Ese alumno cuyos padres están tan encima de él con respecto a que saque buenas notas que terminan asfixiándolo sin darse cuenta. Está muy bien trabajado y es por eso que creo que me ha calado hondo, aunque sea para mal.- Gerard (Marcos Franz)
Vale, voy a ser directa. Es el típico amigo despistado que no se entera de nada y muy, muy bocazas. Es uno de los personajes que ni fu ni fa. No me ha disgustado pero me ha resultado un tanto plano. Tiene sus puntos álgidos y sus momentos pero no ha terminado de gustarme. Me ha parecido que es el que menos a madurado de todos y el que menos ha evolucionado en comparación con otros que lo han hecho a pasos agigantados. Es uno de los principales pero, para mí, podría haberse quedado como un secundario más.
- Marc (Adrian Grösser)
Es el típico graciosillo de clase que siempre está dispuesto a hacer cualquier broma sin darse cuenta de que puede ofender a alguien, pero con un corazón muy noble que termina por vencer a esa faceta suya de cuenta chistes. Me ha encantado su historia. Es tierna pero dura a la vez y es de esos personajes que te producen ternura a medida que los vas conociendo. Al principio me produjo cierto rechazo por ser ese típico bromista toca narices que no tienen ninguna gracia, pero pasó a ser un osito de peluche adorable con mucho que ofrecer. También me parece que es uno de los que más evoluciona para bien y con cambios muy drásticos.- Berta (Candela Antón de Vez)
Con ella me ha pasado un poco como con Tania, aunque Berta es todo lo contrario. Es esa chica macarra que contradice todo lo que le digan y salta a la más mínima sin importarle las consecuencias. Pero, como es de esperar, todo ese carácter se debe a la vida que lleva con su familia. Y digo que me ha pasado un poco como con Tania porque al principio apenas aparece dos o tres veces en los capítulos y no se sabe nada de ella, de su vida personal, hasta mucho después. Es un personaje que ha ido cogiendo protagonismo a medida que pasan los capítulos hasta convertirse en una protagonista más también con sus partes oscuras y sus partes claras, evolucionando a la par que los demás y una evolución muy grande.
Si queréis ver personajes entrañables y muy reales, conocer a un profesor único y aprender un poco de filosofía, no os podéis perder esta serie porque merece muchísimo la pena. Yo estoy deseando ver la segunda parte, Sapere Aude porque tiene pinta de estar muy bien.
¡Nos vemos en la próxima reseña!
La vida es una fiesta en la que coincides con mucha gente, van llegando nuevos invitados, pero también hay otros que, por la razón que sea, se van antes. A todos nos tocará irnos algún día, no se olviden. Lo peor de todo es asumir que la fiesta continúa sin nosotros.
PUNTUACIÓN:
No hay comentarios:
Publicar un comentario