Título: El invierno del descontento
Autor: Thomas B. Reverdy
Editorial: Alianza de Novelas (AdN)
Género: Histórica
Tapa: Blanda
Páginas: 191
Año publicación: 2018
Precio: 16,15 | Kindle: 9,49
Más que correr, Candice volaba por las calles de Londres en su bicicleta de mensajero a finales del verano de 1978, con una bolsa en bandolera, abriéndose en las curvas para no rozar el suelo con el pedal al inclinarse, pedaleando sin cesar, sin detenerse nunca, a toda velocidad, como si persiguiese en el pálido amanecer de las farolas que se apagan y en la neblina azulada un sueño a punto de escapársele...
¡Jello!
Hoy os traigo un libro que no me ha gustado nada. No porque esté mal escrito o porque no cuente algo interesante, sino porque ha sido un caos, demasiadas ideas en muy pocas páginas y muy dispersas. Pero no voy a adelantar acontecimientos, a continuación os dejo la reseña de esta obra.
SINOPSIS
Londres, 1979: Candice, estudiante de artes escénicas de veinte años, atraviesa a diario la ciudad en bicicleta. Para pagarse sus clases de teatro, trabaja repartiendo paquetes para City Wheelz, una empresa de mensajería que aprovecha la parálisis de la capital por meses de huelga para hacer negocio. Esta época es la que el periódico The Sun calificó como 'el invierno del descontento': comienzan el desmantelamiento del estado de bienestar, la destrucción de los sindicatos, la precariedad juvenil... Estamos ante el fin de los años dorados y la consiguiente instauración del liberalismo salvaje thatcheriano.
Será precisamente con una desconocida Margaret Thatcher con quien se encuentre Candice en el teatro Warehouse mientras ensaya su papel en Ricardo III con su compañía femenina Las Shakespeareanas. Allí acude la futura jefa de Estado para recibir clases de diccion y mejorar sus posibilidades de ascenso al gobierno. Se volverán a ver, frente a frente, el día del estreno. Para entonces, Candice habrá reflexionado sobre el poder y despertado su conciencia política, repartido panfletos, bailado en pubs clandestinos a ritmo de punk y rock, y superado la infinita soledad que la rodea.
RESEÑA
Para empezar, la idea no está mal. Es una historia que se centra en contar el descontento que había en Inglaterra a finales de los setenta con los políticos, los trabajos y la sociedad en sí. Hubo huelgas muy duras y largas, manifestaciones y luchas. El autor ha querido darle importancia a la dura situación a la que se enfrentaban los ingleses y hace un marco histórico muy detallado. Habla de cómo se encontraban los partidos políticos, los ciudadanos, las empresas y los empleados y el por qué de aquella situación. Esto no estaría mal si hubiera habido algo de trama. Intenta que haya algo de historia pero sin conseguirlo. Hay una protagonista o parece que hay una, pero es solo un personaje que aparece y desaparece a gusto del autor a lo largo de la historia. No hay acontecimientos lineales y lo que va ocurriendo a mitad del libro va dejando de tener algún sentido. Aparecen personajes de repente que no tienen nada que ver con la protagonista, te habla de ellos en profundidad para después desaparecer tan repentinamente como habían llegado.
Es cierto que se lee rápido porque es un libro de pocas páginas y los capítulos son cortos, pero, por lo menos a mí, me ha costado mucho cogerle el ritmo. Va saltando de atrás hacia adelante en el tiempo sin ningún sentido y entremezcla demasiado la vida de la protagonista con los acontecimientos políticos del momento. Creo que ha querido abarcar mucho pero no ha sabido administrar bien la historia. Podría haber sacado mucho más partido a la protagonista, dándole mayor importancia o haciendo que la situación del país la afectara de alguna manera. En cierta ocasión parece que esto va a suceder y que se va a convertir en una revolucionaria, pero eso dura un capítulo y poco más. Intenta darle una historia de amor que está encajada con calzador y, cuando parece que lo más relevante va a coger fuerza, que es su obra de teatro, se desinfla rápido y queda, ya no en un segundo plano, sino en un tercero o cuarto y deja de tener importancia. Me ha dado la sensación de que el autor ha querido centrarse más en la situación política del país que en la propia historia de la protagonista y que ésta está en la historia simplemente para darle algo de emoción, sin si quiera conseguirlo.
Como ya he dicho, como tema histórico está muy bien documentado. Si queréis informaros de todo lo que sucedió en Inglaterra a final de los setenta, podéis leer este libro porque está muy bien resumido, pero poco más tiene esta historia.
Es cierto que se lee rápido porque es un libro de pocas páginas y los capítulos son cortos, pero, por lo menos a mí, me ha costado mucho cogerle el ritmo. Va saltando de atrás hacia adelante en el tiempo sin ningún sentido y entremezcla demasiado la vida de la protagonista con los acontecimientos políticos del momento. Creo que ha querido abarcar mucho pero no ha sabido administrar bien la historia. Podría haber sacado mucho más partido a la protagonista, dándole mayor importancia o haciendo que la situación del país la afectara de alguna manera. En cierta ocasión parece que esto va a suceder y que se va a convertir en una revolucionaria, pero eso dura un capítulo y poco más. Intenta darle una historia de amor que está encajada con calzador y, cuando parece que lo más relevante va a coger fuerza, que es su obra de teatro, se desinfla rápido y queda, ya no en un segundo plano, sino en un tercero o cuarto y deja de tener importancia. Me ha dado la sensación de que el autor ha querido centrarse más en la situación política del país que en la propia historia de la protagonista y que ésta está en la historia simplemente para darle algo de emoción, sin si quiera conseguirlo.
Como ya he dicho, como tema histórico está muy bien documentado. Si queréis informaros de todo lo que sucedió en Inglaterra a final de los setenta, podéis leer este libro porque está muy bien resumido, pero poco más tiene esta historia.
¡Nos vemos en la próxima reseña!
Si crees en el arte, si sabes leer, si te gusta la música, estás jodido. Nada te da miedo ni te impresiona. No te la dan con queso. Y la ilusión se viene abajo, como en una novela de ciencia ficción.
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