Título: Antes de los años terribles
Autor: Víctor del Árbol
Editorial: Destino
Género: Realismo
Tapa: Blanda
Páginas: 461
Año publicación: 2019
Precio: 19,85 | Kindle: 12,34
Los ojos rápidos de Isaías acumulaban impresiones acerca de la mujer que se sienta frente a él. Cécile -así se llama- ha elegido ocupar la incómoda silla en lugar del sofá y eso le parece una declaración de intenciones poco prometedora.
¡Jello!
Hoy traigo una historia desgarradora, llena de crudas verdades y con tintes oscuros sin perder un ápice de intriga y misterio que hacen que no te quieras despegar de las páginas hasta el final. Eso sí, preparaos para sufrir de lo lindo.
SINOPSIS
La vida de Isaías volvió a empezar el día que llegó a Barcelona siento un muchacho y dejó atrás si mundo. Después de mucho tiempo ha construido una nueva vida junto a su pareja, mientras intenta abrirse camino con un negocio de restauración de bicicletas. Todo cambia el día que recibe la visita de Enmanuel, un antiguo conocido que lo convence para que regrese a Uganda y participe en un encuentro sobre la reconciliación histórica de su país. Aceptar esa propuesta hará resurgir un pasado que Isaías creía haber dejado atrás. Se verá forzado a enfrentarse al niño que fue, mirarlo a los ojos sin concesiones y perdonarse a sí mismo, si quiere seguir adelante con su vida y no perder a su mujer, que pronto, y de la peor manera, descubrirá una terrible verdad: no siempre lo conocemos todo de aquellos a quienes amamos.
Cuando se ha llegado demasiado lejos, huir no es una opción.
RESEÑA
Antes de hablar de esta obra tenéis que tener algo en cuenta: preparaos para sufrir a lo lindo en todos los sentidos. Es una historia muy dura, muy real y con mucho suspense de esos que te dejan la piel de gallina y con el corazón en un puño. Si después de saber esto seguís sintiendo curiosidad por esta novela, seguid leyendo la reseña.
La historia de Isaías es la de muchos inmigrantes que buscan salvarse del horror que viven en sus tierras pero, además, él ha intentado rehacer su vida en Barcelona y su pasado no lo deja en paz. Al principio parece que va a ser una historia en la que te va a contar la vida de Isaías, de cómo sobrevivió en su país, cómo escapó y cómo empezó de cero en un país diferente. Pero a medida que van pasando las páginas se vuelve una aventura trepidante donde se viaja al pasado del protagonista desde que era un niño y ya no solo eso, los personajes de su pasado aparecen en su presente, poniendo patas arriba su tranquila vida en el taller de bicicletas.
No te da un respiro. Es un viaje por lo más profundo de África donde se conocerán sus costumbres, su forma de vida, su riqueza, sus miedos y sus supersticiones, aquellas que hacen que la vida de un niño cambie por completo. Es brutal y muy realista, tanto que hay momentos en los que he tenido que dejar de leer porque se me hacía muy duro ciertas partes, además, os vais a encontrar partes explícitas de guerras, asesinatos y torturas entre otras cosas, lo aviso para que no penséis que va a ser algo ameno. Lo que más me ha gustado ha sido que, a pesar de la crudeza de la historia, el autor ha sabido entrelazarla con la intriga y el suspense porque te va dando el pasado del protagonista a sorbos pequeños lo que hace que quieras seguir leyendo para saber qué pasó en su pasado que repercute tanto en su presente y por qué lo mantuvo todo ese tiempo oculto. Además el hecho de que el libro esté escrito entre dos tiempos, el pasado y el presente de Isaías, el autor juega bien con esto y siempre deja el capítulo en el momento más álgido, haciendo que quieras leer el siguiente para llegar otra vez a ese punto para saber qué ocurre y así va jugando contigo hasta las últimas páginas.
La pluma del autor es muy buena. Las descripciones son precisas, sin demasiadas florituras pero suficientes para que puedas hacerte una idea del ambiente oscuro y gris donde ocurre todo. Sus diálogos son profundos, con mucha intensidad y sin dejar una línea al azar ni una palabra puesta en vano. Y, como ya he dicho, sabe mantener la intriga en todo momento, ese suspense que se mantiene hasta el final del libro y la tensión se respira a cada momento sin darte un solo respiro, tanto por la intensidad de los hechos como por la intensidad de la vida de Isaías que no deja indiferente.
El protagonista me ha parecido brutal. No puedes no empatizar con él porque, a pesar de todo lo que ha hecho para sobrevivir, lo entiendes y sufres con él todo lo que le ha ocurrido y tienes ganas de abrazarle y decirle que todo va a salir bien. Parece que seas tú a quien esté contando esa historia tan dura, pareces esa periodista que está con él en su casa, en su salón y que estás tomando apuntes para darle visibilidad a su historia. Y los antagonistas están muy, muy bien conseguidos, tanto que llegas a odiar a todos mucho, muchísimo y tienes ganas de que desaparezcan para que dejen de hacer sufrir a los de su alrededor. También me ha gustado que muchos de los personajes secundarios que aparecen tienen un trasfondo muy importante para la historia central y encajan a la perfección en ella sin que te saque de la trama, al contrario, sirven para entender mucho mejor al protagonista, incluso a los propios personajes secundarios, por qué hicieron lo que hicieron y después el cambio radical de su personalidad es entendible. Ya sabéis que me encantan los personajes con evolución y aquí no falta de eso, todos, absolutamente todos los personajes que aparecen tienen un cambio progresivo y radical que no dejan indiferente.
Si os gustan las novelas duras y a la vez con mucha intensidad e intriga no os podéis perder este libro porque no os va a dejar indiferente.
¡Nos vemos en la próxima reseña!
Yo no alcanzaba a imaginar lo difícil y heroico que puede ser el amor en tiempos de odio. Me parecía que lo natural era que si dos personas querían estar juntas pudieran estarlo sin más.
PUNTUACIÓN:
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