EL CUADERNO DE LAS FLORES. KAYTE NUNN

Título: El cuaderno de las flores

Autora: Kayte Nunn

Editorial: Maeva

Género: Ficción histórica

Formato: Físico

Tapa: Blanda

Páginas: 374

Año publicación: 2019

Precio: 19,95 | Kindle: 9,49

Anna abrió la puerta y vio allí a tres hombres. El que se encontraba más cerca de ella era una mole de aspecto torpe y frente de neandertal; lo seguía un individuo de estatura y edad medias; y detrás de este había uno más bajo, delgado y joven, con tatuajes a lo largo de los fibrosos músculos de los antebrazos.

¡Jello!

Hoy traigo otro de los libros que me tocó en el sorteo de Anika Entre Libros y me ha gustado bastante. Es una novela histórica con mucho misterio y dos protagonistas femeninas con mucha fuerza, cada una a su manera. Está muy interesante cómo la autora va hilando la trama entre las dos historias.

SINOPSIS

Dos mujeres botánicas, un viaje y la búsqueda de una flor que puede dar y quitar la vida.

Cornualles, Reino Unido, 1886. Una joven aventurera y obstinada retoma la incansable labor de su padre y se propone encontrar una flor rara y milagrosa, la trompeta del diablo. Con ese propósito parte rumbo a la ciudad chilena de Valparaíso en un viaje lleno de peligros que amenazarán a su familia.

Sídney, Australia, en la actualidad. Anna encuentra una caja que contiene un cuaderno con deslumbrantes bocetos de flores, una fotografía con la leyenda <<Primavera 1886>> y una pequeña bolsa de semillas. Este descubrimiento alterará su vida, hasta el momento ordenada y previsible, y hará que se lance a una búsqueda que la llevará a enfrentarse a sus miedos.

RESEÑA

Si os gusta la novela histórica, ya podéis estar haciéndoos con este libro porque merece mucho la pena leerlo. La autora no solo nos muestra tres países diferentes, cada uno con sus peculiaridades, también nos hace partícipes de una bonita historia llena de secretos y aventuras. 

Al leer la sinopsis ya sabía que este libro me iba a intrigar bastante y no me equivocaba. Sí es cierto que el comienzo es algo lento. Te va introduciendo en la vida de Anna poco a poco, sus inquietudes, sus miedos, sus preocupaciones. Todo eso para que la conozcamos bien y sepamos cómo actúa frente a las vicisitudes.

La historia se divide en dos personajes narrados en tercera persona y cada una perteneciente a una época distinta, como bien dice la sinopsis. Estas historias se van intercalando en cada capítulo, es decir, un capítulo es de una y el siguiente de otra. Esto hace que la intriga y las ganas de saber vayan en aumento porque la autora, muy astutamente, termina cada capítulo en momentos álgidos o de mucha tensión y te deja con mil ganas de saber qué va a pasar a continuación, pero el siguiente capítulo es de la otra protagonista y tienes que esperar al siguiente para saber qué va a ocurrir. Esto te mete en un bucle de intriga que no para hasta el final.

De las dos protagonistas, la que más me ha gustado ha sido Elizabeth, la que pertenece al siglo XIX. Es muy aventurera, decidida y dispuesta a todo. En comparación con Anna, tiene más alma aventurera que ella. Anna me ha gustado, pero me ha parecido una protagonista un tanto pasiva. Las cosas a su alrededor iban ocurriendo casi por casualidad y a ella la pillaba de por medio. Sí es verdad que pasada la mitad del libro, esto va cambiando y va tomando un poco el control de su vida y de sus decisiones, pero, aun así, no me ha parecido del todo impresionante. Elizabeth, como ya he dicho, es todo lo contrario y, a veces, un poco irreverente. Pero esto hace que su personalidad sea fuerte y decidida y por todo lo que pasa en la época en la que le ha tocado vivir me ha parecido muy valiente cómo toma las riendas de su vida.

A lo largo de la historia van apareciendo más personajes relevantes y otros no tanto, pero que tienen su importancia dentro de la historia y que no revelaré para no destripar demasiado. Solo apuntaré que me ha encantado y es un punto muy a favor de la autora, que los personajes masculinos que aparecen a lo largo de la historia y tienen repercusión en ella y con las protagonistas, son meros acompañantes, ayudantes de los personajes femeninos. El peso de la historia recae totalmente en las dos protagonistas y son ellas mismas las que tienen que salir de sus situaciones y del confort de sus vidas para adentrarse en una aventura increíble.

La pluma de la autora me ha cautivado. Tiene una capacidad increíble de describir los lugares donde se sitúa la historia: Australia, Inglaterra y Chile. Increíble cómo se pueden ver esas imágenes que tan bien describe en el libro. He podido vivir en la Inglaterra y en Chile del siglo XIX como si realmente hubiera estado ahí. Y, sobre todo, las descripciones de las flores me han parecido una maravilla. Casi podía olerlas cuando leía las páginas donde aparecían descripciones detalladas de todo tipo de plantas. 

Éste es otro punto interesante: las flores. Aunque el libro tenga ya dos protagonistas femeninas consumadas, diría que las flores son el tercer personaje que aparece en la historia con una fuerza abrumadora. Tienen mucha importancia tanto en la vida de Anna como en la de Elizabeth. Es más, si no fuera por las flores, la historia no se desarrollaría si quiera. Me ha parecido una guía floral bastante interesante y detallada, además de preciosa por cómo describe la autora las flores que dibuja Elizabeth. Como ya he dicho, casi creía que podía tocarlas. 

El final me ha resultado amargo pero muy sorprendente porque para nada esperaba ese desenlace. Me ha dejado bastante sorprendida y sin palabras porque los últimos capítulos son un no parar de acontecimientos por lo que no pude dejar de leer hasta terminarlo. Tiene un toque amargo, como ya he dicho, pero a la vez está lleno de esperanza y me ha resultado bastante emotivo. Para mí, un final muy a la altura de toda la historia.

Si os gustan las historias de amor a través de los años, las aventuras y misterios por descubrir a través de la historia, no os podéis perder este libro.

¡Nos vemos en la próxima reseña!

He descubierto que solo cuando se contemplan las cosas debidamente con el interés de un botánico, o un artista, se ve realmente su verdadera naturaleza.

PUNTUACIÓN: