Título: El castillo en el aire
Trilogía: El castillo ambulante 2
Autora: Diana Wynne Jones
Editorial: Berenice
Género: Fantástico
Formato: Físico
Tapa: Blanda
Páginas: 310
Año publicación: 2016
Precio: 14,25
Al sur de la tierra de Ingary, en los sultanatos de Rashpuht, vivía un joven mercader llamado Abdullah en la lejana ciudad de Zanzib. Tal como suele suceder con los mercaderes, Abdullah no era rico. Había sido una decepción para su padre y éste al morir sólo le dejó el dinero suficiente para comprar y surtir un modesto puesto en la esquina noreste del Bazar.
¡Jello!
Hoy os traigo la segunda parte de una trilogía que a mí me encanta. ¿Quién no conoce El castillo ambulante? Pues esta es la segunda parte que yo descubrí hace poco por casualidad y al leer la sinopsis supe que se trataba de una trilogía. Y esta segunda parte me ha encantado, muy a Las mil y una noches con ese toque de magia, alfombras voladoras y fantasía que caracteriza a Diana Wynne.
La edición que yo tengo, que es la portada primera, ya está descatalogada, pero en Nocturna han reeditado la trilogía al completo y aquí os dejo la portada de este segundo libro:
SINOPSIS
Al sur de la tierra de Ingary, Abdullah, un joven y no muy próspero mercader de alfombras, pasa su humilde y tranquila vida soñando despierto con que es el hijo perdido de un gran príncipe y está destinado a casarse con una princesa. Pero un día la quietud de sus ensoñaciones se rompe con la visita de un extranjero que le vende una alfombra mágica. Desde ese momento se desata una vertiginosa fantasía, en la que nada (o casi nada) es lo que parece, llena de genios contestones, demonios buenos y malos, animales con inusual personalidad, persecuciones a camello y un castillo flotante cargado de princesas. Y un final que dejará a todos con la boca abierta.
RESEÑA
Si leéis la sinopsis seguro que os recuerda a Aladdín o a Las mil y una noches o, por lo menos, eso fue lo que me pasó a mí. Tengo que admitir que esta autora ya me embaucó con El castillo ambulante, cuya reseña podéis leer aquí, y en esta continuación no podía ser menos.
Aunque sea una continuación de El castillo Ambulante, la historia, en principio no tiene nada que ver con el primer libro. La trama y los personajes son muy diferentes. Es más, el protagonista, Abdullah, al principio me parece odioso. Un vendedor de alfombras que en vez de preocuparse de su trabajo, lo único que hace es soñar con lo que le gustaría ser: más rico, con más tierras... Vamos, un príncipe en toda regla. Y a mí no ha hecho más que sacarme de quicio desde el principio. Cobarde y muy, muy convenido con lo que le interesa. ¡Horrible!
Por suerte, a medida que va avanzando la historia, su actitud y su forma de pensar va cambiando para bien, va evolucionando y ahí es donde radica la gran moraleja que siempre deja la autora tras sus historias. Tanto en el primer libro como en éste y, seguramente en el tercero, su moraleja me ha parecido preciosa y muy necesaria, envuelta en un mundo lleno de fantasía y aventuras que vas descubriendo a lo largo de la lectura.
La pluma de la autora, como dije con el primer libro, me encanta, me enamora. Es capaz de recrear todo un mundo de la nada y hacerte partícipe de él sin ningún esfuerzo. Por un momento eres capaz de creer en la magia y en la fantasía. Eso se consigue muy pocas veces y su manera de escribir es puro. Y, aunque te muestre momentos duros o siniestros, nada te parece demasiado malo porque todo tiene un color brillante que te tranquiliza. No sé cómo explicar su manera de escribir más que así, pureza y llena de colores llamativos. Debéis leerla para entrar en su mundo.
Y el final me ha encantado. En los últimos capítulos es donde se ve la relación con el primer libro, pero no desvelaré mucho más para que os llevéis la grata sorpresa. A mí me hizo mucha ilusión cuando leí esta parte y no pude borrar la sonrisa hasta la última página.
Si os gustan los libros de fantasía pura, aventuras y un bonito mensaje detrás, no os podéis perder ningún libro de esta trilogía. ¡Yo ya estoy deseando leer el último para volver a sorprenderme y soñar!
¡Nos vemos en la próxima reseña!
Si he aprendido algo de este penoso negocio, es que ni si quiera yo, el sultán de Zanzib, aun siéndolo, puedo engañar al destino.
PUNTUACIÓN:
No sé, esta autora no es para mí, leí el primero pero no me convenció, veo que te ha gustado mucho su forma de narrar, pero a mí no me gustó, me pareció que la historia no tenía suficiente desarrollo como podría. Eso sí, me gusta que al final se una con la otra. Oh, y las nuevas ediciones son preciosas^^
ResponderEliminarUn saludo,
Laura.
Sí, esas ediciones me gustan mucho. No sé si me haré con ellas. Y su pluma es bastante particular, la verdad, no es a gusto de todo el mundo, pero a mí me resulta curiosa la forma de contar las cosas.
Eliminar¡Saludos!